La Real Sociedad se impuso este domingo 0-2 en el Benito Villamarín, resultado que le asegura, a falta de una jornada, la sexta posición en la tabla y jugar la Liga Europa la próxima temporada, a lo que también optaba el Betis, pero para lo que ya está descartado, aunque se queda con la séptima y con ello un puesto en la Liga Conferencia.

Un gol del Brais Méndez, en los inicios, y otro de Mikel Merino, cuando se acababa la primera mitad, pusieron el 0-2 para la Real Sociedad al descanso ante un Betis que, en la segunda, parte falló un penalti y le anularon un gol que evitaron la reacción.

Ambos llegaron al Villamarín en dura pugna por situarse en la sexta plaza de la tabla, que da derecho a jugar la Liga Europa y que defendía la formación guipuzcoana, con un punto más que la sevillana, por lo que el triunfo visitante sería definitivo y el local casi a falta de la última jornada de LaLiga, que se disputará la próxima semana.

El séptimo puesto da derecho a disputar una ronda previa de la Liga Conferencia, tercera competición continental que es también un premio, aunque de consolación después de aspirar al torneo superior, por lo que desde el inicio eso se notó en el estadio verdiblanco.

El entrenador del Betis, el chileno Manuel Pellegrini, acumuló para esta cita hasta siete bajas, las mas recientes del centrocampista argentino Guido Rodríguez y del mediapunta Isco Alarcón, éste líder indiscutible en la formación sevillana pero que padece una fractura de peroné.

La Real, que tenía enfrente a su 'bestia negra' de los últimos años, porque no ganaba al conjunto verdiblanco desde el 18 de octubre del 2020 (0-3 en el Benito Villamarín), también acumulaba bajas, como Martín Zubimendi, Igor Zubeldia y Javi Galán, que se unían a los lesionados Aihen Muñoz y Carlos Fernández, pero además de última hora, pese a que estaba anunciado en el 'once', el central Robin Le Normand salió del equipo y en su sitoó fue titular Jon Pacheco.

No hubo demasiado tiempo para ver cómo se plantaba el choque, ya que antes de que se cumpliera el minuto cinco la formación txuri urdin ya estaba con un 0-1 con un golazo de falta directa de Brais Méndez, quien puso el balón por la escuadra tras un potente lanzamiento.

El tanto fue un resorte para el Betis, que tras poner el balón otra vez en juego se volcó con todo para devolver al partido a la igualdad en el marcador, con lo que atosigó al rival y lo presionó alto para recuperar el balón y montar opciones de marcar.

El central marroquí Chadi Riad tuvo una clarísima a los cuarenta minutos, con un zapatazo con la zurda desde lejos que acabó con el balón estrellado en el larguero después de que le metiera la mano el meta Álex Remiro.

Pero lo que pudo ser el empate se convirtió en un 0-2 poco después, tras una pérdida de balón de Pablo Fornals y una buena definición de Mikel Merino ante el portero portugués Rui Silva. Fue el segundo remate visitante entre los tres palos en la primera parte y el segundo gol.

En la segunda, pese a la entrada de Sergi Altimira y Rodri Sánchez en el campo desde el inicio, el Betis no salió demasiado enchufado, pero aún así, a los 63 minutos, se pitó un penalti por mano del malí Hamari Traoré que pudo apretar el marcador, aunque el marroquí Ez Abde, que también había salido minutos antes, lo tiró a lo 'panenka' y no engañó a Remiro.

El infortunio en el conjunto andaluz siguió cuando en el minuto 79 Ayoze Pérez marcó el que podía ser el 1-2 pero el árbitro, a instancias de VAR, lo anuló al considerar que al canario le dio el balón en la mano antes de rematar a la portería.

Esa jugada ya fue la de la puntilla para el Betis, que no tuvo poder de reacción ante un rival que controló bien en la defensa para que pasaran los minutos y no sucediera nada más.