El Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo que impulsa el Ministerio de Sanidad se plantea reducir la prevalencia del consumo de tabaco y productos relacionados como los vapeadores. Es un plan antitabaco que pretende ampliar los espacios libres de humos, subir impuestos y ampliar los planes de cesación tabáquica.Sin embargo, el descenso del consumo de tabaco, unido al aumento del precio de las cajetillas, no impide que la Administración recaude más.
Los datos que publica el Comisionado para el Mercado de Tabacos, organismo dependiente del Ministerio de Hacienda, sobre el tabaco dispensado en las expendedurías oficiales, confirman que hasta octubre las ventas en la provincia de Cuenca se mantienen al alza. Puede parecer un contrasentido porque según Sanidad se fume menos, pero se vende más tabaco. Los datos así lo corroboran y puede tener su explicación en la subida de precio y en las dificultades que tiene para muchos fumadores abandonar ese hábito.
Hasta octubre, según los datos consultados por La Tribuna en la web del Comisionado para el Mercado de Tabacos, las ventas en territorio conquense se incrementaron un 1,7% respecto al mismo periodo de 2023. En concreto, hasta octubre de este año las ventas ascienden a 51,6 millones de euros, cuando hace un año se situaron en 50,7 millones.
Como suele ser habitual, el mayor montante de las ventas entre los fumadores conquenses está en las cajetillas de tabaco y eso que su precio no deja de subir. Una cajetilla de tabaco rubio, por ejemplo, supera de largo los cinco euros. Sin embargo, pese a que son más caras, en los diez primeros meses del año las ventas de cajetillas de cigarrillos de las diversas marcas que hay en el mercado representan el 88,2% del total, muy por encima de los cigarros o puros, el tabaco de liar o el de pipa. Solo en el mes de octubre, los conquenses se gastaron 4,5 millones de euros en comprar cajetillas en los estancos y máquinas expendedoras repartidas por los distintos municipios. No obstante, fue en verano, concretamente en agosto, cuando más dinero se desembolsó para comprar cajetillas: 5,8 millones de euros.
Tras las cajetillas, el mayor volumen de venta entre los fumadores conquenses está en el tabaco de picadura de liar, que supera los cuatro millones de euros hasta octubre, muy por encima de los 3,8 millones de euros que contabilizó en los primeros diez meses de 2023. Su precio, inferior al de las clásicas cajetillas, provoca que muchos fumadores se decanten por liar pitillos con este tabaco. De hecho, su incremento interanual es del 3,21%, más del doble de las ventas de cajetillas. Las ventas de cigarros o puros, sumaron hasta octubre 1,5 millones de euros y la picadura de pipa se quedó en 541.685 euros.
El consumo está en la cifra más baja en 30 años. El número de fumadores en España está en los niveles más bajos en los últimos 30 años. Así se desprende de la Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España (Edades 2024), en la que se documentan las sustancias con mayor prevalencia de consumo en los últimos 12 meses en nuestro país.
Según esta encuesta del Ministerio de Sanidad, que se dio a conocer la semana pasada, el tabaco es, tras el alcohol, la sustancia psicoactiva más consumida en España entre la población de 15 a 64 años con una prevalencia de consumo alguna vez en la vida del 66,6%, dato inferior al obtenido en la encuesta de 2022. El consumo en los últimos 12 meses también ha descendido con respecto a la última medición, registrándose el dato más bajo de toda la serie histórica (36,8%).
Con relación a la prevalencia del consumo diario de tabaco, el 25,8% de las personas reconocen haber fumado tabaco a diario en los últimos 30 días, dato que ha descendido notablemente con respecto al dato de 2022 (33,1%).