Los arcos del Ayuntamiento de la capital han sido el escenario elegido por las instituciones conquenses para guardar un minuto de silencio por las 192 víctimas de los atentados en Madrid del 11-M, cuando se cumplen dos décadas.
Representantes de los distintos grupos de la Corporación municipal, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Gobierno central, Subdelegación de Defensa, Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local se han dado cita al mediodía en este punto del Casco Antiguo para "recordar y homenajear, ahora que se cumplen 20 años de los atentados, no solo a las víctimas y a sus familiares, sino también a todas aquellas personas que sufrieron estos terribles atentados; gente que todavía está con secuelas físicas y psíquicas", tal y como ha asegurado el alcalde de la ciudad, Darío Dolz.
La delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, también presente en esta concentración aprovechando su estancia en la capital para participar en la Junta Local de Seguridad de Semana Santa, se ha manifestado en la misma línea y ha indicado que "hoy es un día para el recuerdo de las víctimas y el apoyo a los familiares que también sufrieron esa pérdida de sus seres más queridos. Además de ser un día para el reconocimiento de todos las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y para todas aquellas personas que de forma indirecta, como personal sanitario, no solo se volcaron de forma voluntaria sino también por su trabajo",
Tolón ha recordado que "la sociedad española se echó a la calle no solamente para denunciar estos atentados, en los que perecieron una treintena de castellanomanchegos, sino también para ayudar de alguna forma a las víctimas y familiares".
Dolz ha querido transmitir su "más sincero pésame y condolencias a todas las familias y a todos los heridos, a esas más de 2.000 personas heridas en este fatídico atentado".