La obra pública juega, sin duda, un papel impulsor de la actividad económica de un país, máxime en periodos de crisis, e, incluso, cobra un peso específico aún mayor en provincias, como Cuenca, con un modesto desarrollo empresarial, al menos, en comparación con otros territorios vecinos, como Madrid o Valencia.
De ahí que se pueda considerar una auténtica buena noticia la evolución alcista de la contratación pública en Cuenca en el último lustro, en el que ha experimentado un crecimiento exponencial, hasta el punto de multiplicarse por más de tres veces el importe global de las obras licitadas por las distintas administraciones públicas en ese periodo.
El último informe de la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan), que aglutina a las principales compañías españolas del sector, constata que la obra pública licitada en la provincia de Cuenca, tanto por el Estado como por el Gobierno autonómico y los distintos ayuntamientos, ha alcanzado en el recién finalizado 2023 un montante total de 87.184.000 euros.
Una cifra que, a pesar de ser un 6,5 por ciento inferior a los casi 93,3 millones de euros del 2022, multiplica por más de tres veces el volumen de las obras públicas licitadas antes de la pandemia, en 2019, cuando ascendieron a algo más de 26,3 millones de euros; es decir, cerca de 61 millones de euros menos que en la actualidad.
Evolución. En esta evolución, donde el año de la pandemia marcaría un antes y un después, la llegada de fondos europeos para combatir los daños provocados por la crisis del Covid-19, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, supondría un revulsivo de la contratación pública sin precedentes, que queda más que patente en las cifras ofrecidas por Seopan.
Y es que mientras en prepandemia la obra pública licitada en Cuenca se elevó a 26,3 millones en 2019 y a 23,4 en 2020, esta cifra experimentó un vuelco total a partir de 2021, cuando se alcanzó casi el triple, 67,2 millones de euros, que continuaría incrementándose en 2022 a los 93,1 millones, hasta llegar a los actuales 87,1, de los que el 52,8% de los proyectos por importe de 46 millones de euros, han sido de edificación y el 47,2% restante (41,1 millones) correspondieron a obra civil.
Un volumen de contratación pública que más de la mitad fue licitada por los ayuntamientos, 48,1 millones de euros, seguida de los casi 28,9 millones del Gobierno regional y los 10,2 de la Administración General del Estado.
Septiembre se convirtió en el mes con mayor volumen de obra pública, con un importe de 16,7 millones de euros, seguido de abril, con 12,2, y mayo, con 8,9. Mientras, en el polo opuesto, se colocó julio, con licitaciones por valor de 725.000 euros, seguido de junio, con 4,6 millones y agosto, con 4,9.
Por administraciones licitadoras, el Gobierno regional es el que más ha visto incrementar el volumen de la contratación en el último lustro, al pasar del poco más del millón de euros de 2019 a los 28,8 de 2023, mientras que la de los ayuntamientos ha crecido de 20 a 48,1 millones y la del Estado de 5,1 a 10,2 millones.
Castilla-La Mancha. Aun así, Cuenca se sitúa como la última provincia de la región en montante de obra pública licitada durante 2023. Una clasificación autonómica liderada por la provincia de Albacete, donde las distintas administraciones públicas licitaron actuaciones por un importe global de 255,4 millones de euros, lo que supone casi la tercera parte del montante castellanomanchego.
Le siguen en este particular ranking Toledo, con la licitación de obras por importe de 172,6 millones de euros; Ciudad Real, con 165,4; Guadalajara, con 144,4; y, cerrando y en último lugar, Cuenca, con 87,1 millones. Y es que se licitaron obras en la región por valor de 833,2 millones.