El nuevo Jesús Resucitado será obra de un prestigioso escultor

Álvaro Fernández
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El maestro sevillano Navarro Arteaga es el elegido para realizar una imagen que se espera que pueda ser bendecida en el Congreso de Nacional de Hermandades

La actual imagen de Nuestro Padre Jesús Resucitado, que fue adquirida en el año 1949 por el párroco José María Alfaro. - Foto: J.C.

La Muy Antigua Hermandad de las Cuarenta Horas y Resurrección Gloriosa de Nuestro Señor Jesucristo de Tarancón ha comenzado un proceso de transformación importante al anunciar la renovación de la imagen de su titular, Jesús Resucitado. Para ello, la hermandad ha logrado firmar un contrato con uno de los imagineros más reconocidos del panorama nacional, el sevillano José Antonio Navarro Arteaga, quien, con más de 35 años de trayectoria en la imaginería, ha decidido embarcarse en este desafío. 

La nueva imagen de Jesús Resucitado se espera que esté terminada para el verano de 2026, para poder ser presentada en sociedad durante el segundo Congreso Nacional de Hermandades del Resucitado, que se celebrará en Tarancón, y donde se bendecirá oficialmente.

El presidente de la cofradía, Javier López, explica con entusiasmo los detalles del proceso. Según López, la nueva pieza buscará reflejar la alegría y esperanza de la resurrección. «Es lo que mueve nuestra fe, y por fin tendremos una imagen que lo exprese», comenta el presidente, resaltando que el proyecto ha sido un sueño hecho realidad para la hermandad.

López destaca a La Tribuna la importancia de haber confiado este trabajo a Navarro Arteaga, quien, a pesar de haber realizado numerosas obras a lo largo de su carrera, nunca había hecho una imagen de Jesús Resucitado. «Para él, éste será probablemente su único Resucitado, y eso le da un valor añadido, ya que no es lo mismo hacer una dolorosa, de las que ha hecho varias, que crear una imagen de la Resurrección», afirma. Además, la oportunidad de presentarla en el Congreso Nacional será un momento clave para la hermandad, que podrá compartir un hito de gran relevancia.

 La hermandad se encuentra inmersa en una nueva etapa que no solo se limita a la renovación de la imagen, sino al impulso de la devoción y la fe entre sus miembros y la comunidad en general. «Lo más importante de esta imagen no es  la obra en sí, sino lo que puede generar en la gente, y eso es lo que buscamos, y con la confianza de Navarro Arteaga estamos convencidos de que lo lograremos», subraya el presidente de la hermandad.

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