El Rebi Cuenca quiere aprovechar cada jornada para seguir escalando posiciones en la tabla. Este domingo (18 horas) visita la cancha del Ademar León y lo hace en «buenas condiciones después del partido ante el Valladolid donde dimos un paso al frente en el juego», explica el técnico, Lidio Jiménez. No obstante, el entrenador lamenta que «nos ha perjudicado el parón de la semana pasada porque han llegado algunos jugadores tocados de sus selecciones», aunque recalca que «moralmente estamos bien y afrontamos el partido en un buen momento».
El conjunto leonés es quinto en la tabla y eso hace que «sea un rival lejano», pero «si nos queremos acercar a ellos es el momento de arañar puntos». El Rebi Cuenca, que se sitúa en la decimotercera plaza, es consciente de que tan solo le separan de su rival de este domingo cinco puntos porque la competición está muy apretada. Eso significa que, si el cuadro conquense logra la victoria, podría dar un golpe sobre la mesa.
Sin embargo, el triunfo costará caro porque se trata de un adversario que está «jugando con solvencia en casa». Cuentan con «varios extremos muy buenos» y despliegan «un juego directo». Es evidente que se trata de un duelo «muy complicado», pero también es cierto que el Rebi Cuenca viaja «mucho mejor que hace un mes». Si el equipo consigue evitar que el rival «corra», tendrá más opciones de luchar por los dos puntos.