El Ayuntamiento de Cuenca calcula que el arreglo del último tramo de la avenida de los Alfares, que antes fue la carretera de entrada a la ciudad desde Madrid, costaría, al menos, 1,5 millones de euros.
El concejal de Urbanismo, Mantenimiento Urbano y Movilidad, Adrián Martínez, así lo aseguraba este lunes en sesión plenaria como respuesta al ruego del Grupo Municipal Popular, expuesto por su edil, Marta Segarra, para que el equipo de Gobierno tomara cartas en el asunto y acondicionara de manera urgente esa parte de la avenida de los Alfares, comprendida entre la rotonda con la avenida de San Julián y la rotonda de conexión con la A-40 y la circunvalación de la Sierra, «por presentar muchos baches, la inexistencia de un acerado que propicie un tránsito peatonal adecuado y la acumulación de basuras».
Martínez subrayó que «nosotros mismos somos los primeros que queremos arreglar este tramo» y reconoció que ya existe un proyecto de actuación, que incluye no sólo la pavimentación de la calzada, sino también el acerado, la zona de tránsido, la iluminación, etc., lo que, sin duda, hace de este proyecto «algo muy costoso». Por eso dijo que «tenemos que ver cómo conseguimos estos créditos para financiar la obra».
Desde las filas populares, se incidió en la preocupación de los vecinos, comerciantes y trabajadores por el lamentable estado de conservación de esta calle, al tiempo que dejaban claro que eran conscientes de la existencia de un "vacío administrativo" en relación con este tramo, porque "se carece de documentación concreta sobre la cesión de esta vía al Ayuntamiento, antes carretera y ahora sin definir", detalló Segarra.
De ahí que también instaran al equipo de Gobierno a trabajar en la regularización administrativa de esta zona, a lo que el concejal de Urbanismo les contestó que "habrá que revisar la situación".