El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, manifestó su absoluto rechazo a las declaraciones del presidente argentino, Javier Milei, y consideró que son una injerencia en cuestiones internas de España, así como también rechazó el insulto y la calumnia a la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, y al propio presidente. Así se mostró Álvarez, en declaraciones a los periodistas en Cuenca, al ser preguntado por la crisis diplomática desatada por las declaraciones de Milei en las que llamaba «corrupta» a Gómez en un mitin de Vox, y antes de participar en unas jornadas sobre Repercusiones de los fenómenos interempresariales en las relaciones laborales que organizan el Consejo General del Poder Judicial y la UGT.
El secretario general de la UGT dijo que «no es normal que el presidente de Argentina venga a nuestro país y, como si fuéramos una colonia del Reino de Argentina, decida insultarnos e insultar a nuestro Gobierno». Lamentó la perorata de cuestiones de carácter ideológico de Milei, ya que la democracia tiene que reinar en España, en Europa y en el mundo, «y la ideología que defienden estos señores está muy lejana de la democracia occidental tal y como la entendemos». Álvarez manifestó su solidaridad con los trabajadores argentinos y aseguró que la UGT no va a romper con los sindicatos argentinos, sino al contrario.
Para Álvarez, las recetas económicas de Milei van a «empeorar sustancialmente la situación económica y política para la inmensa mayoría de los argentinos». E indicó que ha sentido con cierta satisfacción las declaraciones del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, al rechazar la injerencia de Milei y su falta absoluta de respeto hacia el presidente del Gobierno, así como que haya recordado que representa a una organización que tiene en su seno empresas que tienen interés en Argentina.