«Ojalá pueda formar parte de la 'Champions' de Cuenca»

Leo Cortijo
-

El iniestense ya tiene algunos compromisos firmados y espera que sean muchos más en este curso. Uno de ellos, el de la Feria de San Julián de Cuenca, reconoce que sería todo un «sueño».

«Ojalá pueda formar parte de la 'Champions' de Cuenca» - Foto: Reyes Martinez

Entre ceja y ceja tiene su tarde en Las Ventas, en plena Feria de San Isidro. Alejandro Peñaranda (Iniesta, 2002) es consciente de que un triunfo ese día allanaría su camino a lo largo de esta temporada, su primera de forma completa como matador de toros. El iniestense ya tiene algunos compromisos firmados y espera que sean muchos más en este curso. Uno de ellos, el de la Feria de San Julián de Cuenca, reconoce que sería todo un «sueño».

Esta es la primera temporada completa como matador de toros. Todavía no ha arrancado, pero ¿cómo la afrontas? ¿Cuáles son los pilares maestros de este curso? Entiendo que el grado de madurez es bien distinto...

Pues la verdad es que la afronto con muchísima ilusión y con muchísima responsabilidad. La verdad es que mi nivel de afición sigue en aumento y eso es muy positivo para mi carrera. Este año, de momento, hay cosas tan importantes como Madrid, la Copa Chenel o mi presentación como matador en Iniesta, y son fechas que como no te pillen preparado... No puedes dejar pasar esas oportunidades.

«Ojalá pueda formar parte de la 'Champions' de Cuenca»«Ojalá pueda formar parte de la 'Champions' de Cuenca» - Foto: Reyes Martinez

Abres temporada con ese compromiso en la Copa Chenel. ¿Qué te despierta el cartel con Rubén Pinar o Ruiz Muñoz? La Copa Chenel da mucha visibilidad a los toreros nuevos, ¿no crees?

Al final, entrar en esas ferias en las que están los puestos tan limitados es complicado, por lo que esto es una oportunidad muy positiva de cara a que te conozca el público, y para ir toreando, porque al final si vas pasando de ronda acabas toreando un número importante de corridas. Recuerdo que cuando salió el cartel me hizo mucha ilusión por estar con Rubén, porque con él llevo desde chiquillo. Recuerdo ir a la tapia y verlo… quién me iba a decir a mí que unos años más tarde iba a estar acartelado con él...

La fecha estrella en el calendario, sin ningún tipo de dudas, es el 4 de junio, la confirmación de alternativa en Las Ventas. No deja de ser un premio, entiendo, pero también una responsabilidad enorme, ¿verdad?

Para mí ya era un sueño, tal y como sucedió el año pasado, haber estado anunciado en San Isidro como novillero y haber podido cortar esa oreja. Este año como matador de toros… ni te cuento. Tiene mucha seriedad el compromiso adquirido y, la verdad, es algo que nunca hubiera imaginado. Creo que es una fecha muy buena, un cartel muy del gusto del aficionado. Creo que va a haber mucha rivalidad porque son dos toreros a los que tengo mucha admiración y una ganadería a la que le tengo muchísima fe. Estoy seguro de que saltará algún toro embistiendo y creo que ahí estaremos los tres para aprovecharlo.

Oye, ¿qué esperas de la afición de Madrid? A esos novilleros que cortan una oreja luego les esperan como matadores...

[Risas] Es un runrún distinto. La verdad es que de novillero sí que lo he ido notando, porque cada tarde que he pisado Madrid se me ha medido mucho más y creo que el nivel de exigencia siempre es mayor cada vez que voy. Creo que de novillero te echan una cuenta y te miden de una manera, pero de matador de toros ya es como 'borrón y cuenta nueva'. Con todo, no va a dejar de haber esa exigencia por ver a un torero que en poquito tiempo ha cambiado y ha madurado... Creo que eso es lo que me van a exigir.

Madrid ha marcado tu carrera como novillero… ¿Cómo lo gestionas a nivel mental?

La faceta mental es fundamental. Me acuerdo de que se parece mucho esta confirmación a lo que fue mi presentación en Madrid, porque al final son esas mismas ganas de triunfar. Esa ilusión por hacer el paseíllo como novillero, que esta vez será como matador de toros, ganan los nervios y a la incertidumbre, lógica, que te crea cuando ya vas más veces al templo del toreo. Entonces, de momento, lo que te digo Leo, esa ilusión puede a esos miedos, siendo consciente de la importancia de esa tarde y de la oportunidad que supone.

En Valencia has cortado cinco orejas, has abierto la puerta grande en dos ocasiones… ¿No crees que por méritos propios tu nombre tenía que haber estado en la Feria de Fallas, por no hablar de que la alternativa la tenías que haber tomado allí?

De Valencia y de su afición solo tengo recuerdos buenos, además desde el primer momento que llegué. La verdad es que fue un 'lujazo' poder torear allí en Fallas y también en octubre y no tengo nada más que recuerdos buenos de esas dos tardes porque, al final, salieron las cosas bien y creo que esos méritos que se hacen en la plaza deberían de ser luego recompensados… Recompensados a la hora de confeccionar los nuevos carteles y, sobre todo, con gente joven como yo y muchos otros toreros que creo que son el futuro de la fiesta; deberían abrir un poquito carteles y recompensar esos triunfos.

Qué complicado es entrar en los carteles de postín y en las principales ferias de la temporada...

Y tanto, no ha habido manera ni de tomar esa alternativa ni de entrar en Fallas, pero bueno… estoy muy tranquilo, sé que la plaza no se va, llegará seguro el momento y lo que no me puede pillar es distraído. Me tiene que pillar preparado para aprovecharlo al máximo y volver a dar un golpe encima de la mesa.

¿Cómo se puede ser tan rocoso mentalmente después de ver que te das contra un muro?

[Risas] Creo que desde el principio nos lo inculcan en la escuela taurina porque si no… no tiene otro sentido. Desde el primer instante nos dicen lo complicado que es y las injusticias que tiene el mundo del toro, pero hasta que no te pasa no lo valoras... tú no le hechas cuentas y hasta que no te pasa, no lo valoras; pero bueno, es lo que te he dicho antes: el tren pasa una vez y lo que no te puede pillar es distraído. Este año es un buen año para que pase el tren y lo que no quiero es que me pille pensando en las musarañas. 

Otra fecha ya cerrada es la del Sábado de Gloria, en tu plaza, Iniesta, ¿Qué supone para ti presentarte como matador de toros ante tu afición?

La verdad es que no es fácil, tengo muchísimas ganas. En Iniesta es donde siempre he vivido, donde vive toda mi familia y donde, al final, te cruzas con todo el mundo a diario. Con esos aficionados que van a la plaza y que luego pueden juzgar, ¿no? Por eso la responsabilidad es máxima, porque quiero dejar una muy buena imagen para que mi pueblo esté orgulloso de mí, como el cuarto matador de toros que da el pueblo. 

¿Cómo recuerdas la alternativa en Tarazona de la Mancha el año pasado?

Salió la oportunidad de tomarla en Tarazona y oye, hablándolo con Luis [apoderado], lo pensé y le dije: «Qué mejor sitio que Tarazona, que al fin y al cabo es un poco feudo entre Albacete e Iniesta». Era un sitio muy cercano para que todos los aficionados pudieran ir a verme y me apoyaran, ¿no? Y así fue. La verdad es que fue una cantidad de aficionados increíble. Recuerdo una tarde con muchísimo cariño de gente conocida, de gente de Tarazona que quizás ni me conocía y fue una tarde muy bonita. Se portaron muy bien conmigo tanto Castella como Borja, y le pude cortar cuatro orejas a la corrida y triunfar, que era lo que iba buscando.

Has hablado de Luisma, tu apoderado, ¿qué tal con él? ¿Habéis conseguido 'armar' un buen equipo?

Desde el primer minuto confío en mí, siempre creyó en mí. Me cogió cuando prácticamente no tenía nada, acababa de debutar con picadores y había toreado muy poquito, ese año solo tres novilladas y decidió confiar en mí… Hasta el día de hoy, que creo que más que apoderado y torero somos amigos y para mí estar feliz dentro de la profesión es lo que más me llena. Junto a toda mi cuadrilla, creo que hemos hecho un equipo muy bueno. Creo que son gente muy válida, estoy muy tranquilo por lo que tengo alrededor y si algún día me tengo que ir de aquí, lo haré feliz y sabiendo que he hecho las cosas bien.

Hablando de tu entorno, tienes una peña también en tu pueblo que te apoya y una familia que está contigo a muerte. ¿Notas el 'calor' del aficionado conquense?

Totalmente, la verdad que es una barbaridad que todo un pueblo se vuelque contigo. Es impresionante ir a muchas plazas y ver siempre caras conocidas. Empezando por mi madre que es la presidenta de mi peña taurina, que tantísimos socios tiene. O Alberto, el presidente de la Peña Taurina de Iniesta, o José Luis el alcalde, que también siempre que ha podido me ha ayudado en lo que buenamente ha podido. Tengo mucho que agradecer y espero agradecérselo con triunfos porque creo que es la mejor manera de alegrarles y el bien para todos. 

Te has formado taurinamente hablando en Albacete, pero supongo que te hará ilusión hacer el paseíllo en la plaza de toros de Cuenca, en la Champions... 

Totalmente, desde bien pequeño he tenido la oportunidad de venir muchas veces a Cuenca, a una plaza y a una feria de primera. Recuerdo muchas veces que venía con mi abuelo y era una afición muy distinta, por el calor que te dan, eso me llamaba la atención. El año pasado vine como espectador a ver una corrida de toros y me imaginaba toreando aquí. Ojalá puedan salir las cosas y algún día formar parte de esta Champions y triunfar aquí. Sería un sueño para mí...

En este sentido, ¿cómo van las negociaciones con el empresario?

Bueno, hasta donde yo sé, sé que se ha hablado, todavía queda mucho y no se sabe mucho, pero oye, ojalá pueda contar conmigo, con un torero prácticamente local. Sería un sueño torear aquí y, sobre todo, triunfar porque estoy convencido de que si se me da esa oportunidad no voy a defraudar a nadie.

De que se materialice esa tarde y de otras muchas que puedan venir a lo largo de la temporada tendrá que ver con un triunfo en Madrid...

Al final Madrid es la que dicta y la que manda. Mi preparación es muy intensa tanto física como mentalmente, intentando hacer el mayor número de tentaderos posibles y enfocando muy bien esa tarde para que pase algo, lo que sea, pero que pase algo y que la gente salga hablando de mí, que es lo importante, soñando, ¿por qué no? Con un triunfo rotundo sabiendo la dificultad de eso.

En cuanto a la preparación en el campo, ¿cómo ha ido el invierno?

En cuanto acabé la temporada en mi última corrida de toros en Munera, empecé a hacer campo en mayor o menor medida, pero no he parado. Este último mes no, por las lluvias, pero creo que llego con una preparación muy buena, sobre todo mentalmente, que para mí es el 80% de un torero. Quiero ir creciendo y buscando mi toreo y esa técnica que tanto cuesta llegar a encontrar. 

¿Cómo ves el estado actual de la Fiesta? Es más difícil ahora que hace 15 o 20 años, sobre todo para todos los jóvenes como tú?

Yo creo que sí, sobre todo por porque hay un número más reducido de festejos. Hablo con muchos matadores retirados y ellos, en su época, sin terminar de funcionar y demás, ya toreaban una barbaridad de novilladas y corridas de toros igual. Hoy se han reducido los festejos y cuesta cada vez más entrar en cualquier pueblo incluso; y en esas grandes ferias donde las figuras acaparan casi todos los carteles, ni te cuento.

¿Hubieses firmado estar donde estás ahora cuando eras un niño?

Siendo tan niño no le echas cuentas a eso y solo ves lo bonito de la profesión. Sí que es verdad que te llevas muchos palos, pero al fin y al cabo llegar y cuajar un toro en la plaza que sea y poder disfrutar con ese toro, te llena. Al final eso es lo que vale y lo que ando buscando. Cuando iba con mi abuelo o con mis amigos a las excursiones de la peña de Iniesta… quién me iba a decir que el día de mañana iba a ser matador de toros e iba a confirmar en Madrid. ¿Lo hubiera firmado? Pues sí, claro que sí, pero la verdad es que ha sido un camino eh largo. Estoy muy contento con mi trayectoria como tanto novillero sin picadores como con picadores y seguro que la de matador no se va a quedar atrás. 

Un chaval, con perdón, de tan solo 22 años como tú, ¿a qué ha renunciado de su juventud para ser matador de toros?

No… [piensa] Mi juventud ha estado en el mundo del toro y he hecho siempre lo que me ha gustado. Sí que creo que hay una diferencia respecto a los demás jóvenes, que es la disciplina o esa madurez temprana que debemos tener los toreros y estoy muy orgulloso de ello. Creo que aunque pueda ver menos a mis amigos de toda la vida, ellos lo entienden y para mí, no hay nada más bonito que luchar por un sueño y ver que se van cumpliendo objetivos.