Menos hurtos y ciberdelitos reducen la criminalidad en Cuenca

Miguel A. Ramón
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El número de infracciones penales en el primer trimestre del año ha registrado un descenso anual del 3% en la provincia de Cuenca hasta quedarse en los 1.658 y del 5% en la capital hasta reducirse a los 603

Las infracciones penales registradas en Cuenca capital durante los tres primeros meses del año se han elevado a 603, un 5% menos que hace un año. - Foto: Reyes Martínez

Cuenca despedía 2023 con un incremento de la criminalidad, que en la provincia se estimaba en un 5,3% y en la capital en casi un 7%, por el comportamiento al alza de los hurtos y los ciberdelitos. Dos tipos de delitos penales que, sin embargo, ahora, han posibilitado todo lo contrario y han sido los responsables de que la criminalidad haya experimentado un ligero descenso en los tres primeros meses del presente año, tanto en la provincia como en la capital, hasta el punto de ser la cifra más baja de los últimos tres años a estas alturas.  

El balance de criminalidad del primer trimestre, que hacía público este lunes el Ministerio del Interior y al que ha tenido acceso La Tribuna, indica que la provincia de Cuenca ha acumulado hasta marzo un total de 1.658 infracciones penales, 52 menos que hace justo un año, lo que supone una caída del 3 por ciento, gracias al menor número de hurtos y ciberdelitos.

Y es que en este primer cuarto del ejercicio se han contabilizado 259 hurtos frente a los 280 del mismo periodo del año anterior, es decir, 21 menos y, por lo tanto, se ha producido un descenso del 7,5%.

- Foto: Elaboración propia.

Porcentaje de caída que se amplía mucho más si hablamos de ciberdelincuencia, puesto que se ha pasado de los 412 delitos informáticos del primer trimestre de 2023 a los 334 de este año, 78 menos, lo que equivale a una bajada interanual del 18,9%, siempre según el citado balance oficial de Interior.

En concreto, este notable descenso responde especialmente a la caída del 17,1% experimentada por las estafas informáticas, que se han reducido en 62 hasta las 301, frente a las 363 de enero-marzo de 2023.

Éstas han sido, junto a los homicidios dolosos y asesinatos consumados, que esta vez han brillado por su ausencia mientras que hace un año ya se habían dado dos, las únicas infracciones penales que han caído con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

El resto de delitos han subido, eso sí, son bastante menos cuantiosos que los ya citados y, en consecuencia, contribuyen menos al cómputo total de infracciones penales.

Así, por ejemplo, los delitos contra la libertad sexual se han cuadruplicado en este primer tramo del año con un total de ocho, frente a los dos de hace doce meses, y los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria se han incrementado en casi un 48%, al pasar de 19 a 28.

En esta línea, también se han situado los robos con fuerza en domicilios, establecimientos, etc. que han crecido en un 32,4%, puesto que se han registrado 33 más que hace un año y han pasado de 102 a 135.

Capital. El comportamiento de la criminalidad en la capital no dista mucho de lo experimentado en la provincia y el número de delitos ha descendido un 5 por ciento hasta los 603, mientras que hace un año esta cifra se elevaba a los 635. 

La clave de esta caída no ha sido otra que el menor número de delitos informáticos. En concreto, se han reducido en un más que notorio 25,3% hasta quedarse en los 112, frente a los 150 del primer trimestre de 2023.

Comportamiento totalmente contrario han tenido los robos con fuerza en domicilios, establecimientos, etc., que han crecido un 76,7%, al pasar en un año de 30 a 53, así como los hurtos que, en su caso, han subido en una decena hasta los 142, es decir, han aumentado en un 7,6%.

De la misma manera, se han contabilizado tres robos con violencia e intimidación más hasta alcanzar los ocho y dos delitos más de tráfico de drogas  para llegar a los tres.