Bien rezan los refranes populares que los huevos ocultan el secreto de la vida y resguardan los años tras su cáscara, como si entre la clara y la yema hubiera una especie de elixir que protege el cuerpo humano del devenir del tiempo. Así, conectados con ese saber popular que a uno le traslada antaño, a las raíces, al pueblo, a aquello de lo natural que tanto extrañamos en un mundo en el que comer «lo de toda la vida» es casi un sueño Rujamar llena los estantes de los supermercados con productos de calidad, con arraigo en los que el sabor, la sostenibilidad, el bienestar animal son un pilar fundamental.
Pazos, masías, cortijos… estas palabras tienen algo en común y es que todas ellas son maneras de denominar las casas de labor del campo marcando el origen y la zona donde se ubican. En Castilla-La Mancha, como no podía ser de otra manera, también existe una forma particular de denominar a esas casas de labor, las quinterías. Y es que si los valores de una marca hablan de volver a los orígenes haciendo las cosas con calma, sencillez, cariño y mucha dedicación, es casi instantáneo el pensar en una quintería.
Este espacio tradicional que representa el amor a la tierra y el cuidado del producto es el gran protagonista en la nueva línea de productos que llega al mercado de la mano del Grupo Avícola Rujamar. 'La Quintería de Rujamar' es la nueva línea de productos que llega a los lineales de AhorraMás en exclusiva desde el 31 de octubre con una presentación sin igual y unos nuevos muebles expositores que permitirán a los consumidores distinguir 'la Quintería' prácticamente desde que entren al supermercado. Una nueva línea que acerca productos de máxima calidad de la selección gourmet y que además cuenta con el sello de calidad 'Huevos Manchegos' como parte de ese compromiso con el origen a un precio muy competitivo para que el consumidor no tenga que renunciar a un producto natural de cercanía, calidad y certificado.
'La Quintería de Rujamar' es una muestra de que un producto puede ser mucho más en las manos adecuadas, de que las cosas pueden hacerse mejor y que el amor por la tierra y lo natural empiezan desde el mismo momento de la producción, homenajeando a sus orígenes de la quintería original, la finca donde la familia Martínez Hernaiz fundó el grupo empresarial en 1984. El bienestar animal es un pilar fundamental de Rujamar, como ya han demostrado con otras líneas de producto. En el caso de 'La Quintería de Rujamar', las gallinas camperas se crían en instalaciones con extensos parques exteriores en los que los animales pueden recrear el comportamiento natural de la especie. Estos hábitat cuentan con plantaciones de almendros y pistachos ecológicos que aportan seguridad a los animales así como multitud de beneficios.
Tanto en la selección de huevos de 'la Quintería de Rujamar' como en todas sus otras líneas de producción, el grupo avícola tiene como primera premisa el bienestar animal y la salud de sus aves. Como parte de este compromiso en cada granja hay un equipo de nutrición que trabaja diariamente en la elaboración de una alimentación a medida con los mejores cereales. Los expertos varían la composición del pienso en función de la edad, el momento productivo y las necesidades concretas de los animales, dando lugar a unos huevos de calidad.
CALIDAD PARA MANTENERSE, INNOVAR PARA CRECER. Castilla-La Mancha es la región de España que más huevos produce, puede afirmarse por ende que el compromiso de la tierra con este producto es casi una obligación moral y un compromiso que puede mantener los activos empresariales en el futuro. El Grupo Avícola Rujamar, cumpliendo con ese deber con el producto, busca resaltar la calidad de los huevos castellanomanchegos ampliando sus instalaciones sin renunciar a la calidad y avanzando de la mano de la tecnología. Para ello cuentan con un refugio localizado en Honrubia que se centra en la producción ecológica.
Estas instalaciones se unen a las ya existentes dedicadas a la producción campera en Saelices, especializadas en producción libre de jaula en San Lorenzo de la Parrilla, y dedicadas a la recría de pollitas camperas y de suelo en San Lorenzo de la Parrilla y de ecológicas en Saelices. Con la ampliación de sus centros y combinando el origen con la última tecnología Rujamar aporta modernidad, seguridad, progreso, innovación y crecimiento, siendo una de las principales empresas productoras de huevo fresco más modernas que existen en la actualidad.
Cuidar la tierra que nos alimenta es una muestra de responsabilidad empresarial que la empresa avícola se toma especialmente en serio. Además del compromiso de bienestar animal, Rujamar trabaja desde hace muchos años en proyectos de sostenibilidad y medio ambiente. Ejemplo de ello es el programa yo calculo, yo reduzco que han desarrollado con el objetivo de conocer el impacto ambiental y la huella de carbono que genera su actividad para poder aplicar correcciones y mejoras y así tener el menor impacto ambiental posible. Como parte de esas correcciones encontramos el uso de energías 100% renovables que el grupo avícola utiliza para abastecer sus núcleos de producción, siendo una empresa con mínimo impacto medioambiental.
Rujamar no es únicamente origen y raíz, es una mirada hacia el futuro para garantizar la seguridad y la calidad alimentaria, uno de los grandes pilares de la marca. Como muestra de todo este compromiso, han sido la empresa avícola pionera en incorporar la tecnología blockchain en el envase de sus productos. Con esta tecnología se incluye en el estuche un código QR que puede escanearse con el teléfono móvil y que da acceso al consumidor de la trazabilidad del huevo que está consumiendo, una muestra de transparencia sobre el producto que va a comprar informándose sobre distintos aspectos como la edad de la gallina, la fecha de puesta, clasificación y caducidad, la nave y el lote al que pertenece el animal, su alimentación o los certificados de bienestar animal entre otras opciones.
Más allá de los beneficios para el consumidor, el blockchain es una herramienta de gran utilidad para la empresa, que en un hipotético caso de contaminación puede detectar los lotes afectados y tomar las medidas oportunas en tiempo récord.
Entender el origen, cuidar de donde se viene y no olvidar las raíces son las máximas que ponen sello de oro a los productos de Rujamar, pero es la innovación, el uso de la tecnología con sentido y utilidad lo que marca la diferencia de la innovación y compromete a una empresa con su futuro.