El dispositivo contra los incendios forestales está en marcha desde el pasado sábado y el deseo es que se desarrolle sin grandes sobresaltos. Sin embargo, prever cómo se va a evolucionar se antoja imposible, entre otras razones porque en muchos casos los incendios dependen de la suerte. Lo que sí se puede saber es cómo se han desarrollado las anteriores y sacar algunas conclusiones en función de la estadística.
Félix Mateo, director del Centro Operativo Provincial de Incendios Forestales, sabe bien de lo que habla. Lleva años combatiendo los incendios forestales, sintiendo el fogonazo del calor de las llamas y el olor a bosque quemado. Afronta una nueva campaña con un dispositivo que en la provincia cuenta con 611 personas y muchos medios, entre ellos una nueva autobomba.
A las puertas de esta campaña asegura, a preguntas de La Tribuna que «estadísticamente las primaveras lluviosas hacen que, al final, los veranos sean mejores». Es decir, menos incendios y reducción de superficie afectada. «Si lluviera ahora, en junio, nos daría más tranquilidad porque aunque solo sea por estadística ya contaríamos con algo a favor», asegura Mateo. Es el gran deseo de la campaña contra incendios, en la que nunca hay que olvidar que hay un factor como es la suerte, que es muy importante, y que condiciona al dispositivo de técnicos y profesional del Gobierno regional
La campaña en la provincia tiene un presupuesto de casi 22 millones de euros, de los cuales 10,9 millones van dirigidos a la extinción y para prevención, once millones. El dispositivo cuenta con 20 autobombas, 13 retenes de tierra y dos helitransportados, 20 bases de medios terrestres, tres máquinas pesadas, 11 patrullas de vigilancia de extinción, 80 agentes medioambientales y una veintena de ingenieros forestales. Entre las novedades, hay una nueva autobomba en Villalba de la Sierra, un lugar estratégico. En total, hay 611 personas en el dispositivo Infocam de Cuenca y 35 torres de vigilancia, que son fundamentales para la detección temprana de cualquier conato. Respecto a los trabajos de prevención, este año se realizaron tareas en 2.176 hectáreas. Además del operativo del Gobierno regional en la provincia hay que añadir la Brigadas de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF), de la base de Prado de los Esquiladores, que depende del Ministerio de Transición Ecológica, y que cuenta con dos helicópteros y medio centenar de personas.
Mateo afirma que es «un dispositivo potente» y que en Castilla-La Mancha hay un número de medios considerable, tanto terrestres como en número de personas. Además, subraya que si se necesitan más medios el dispositivo regional responde y también, en caso de que sea necesario, la solidaridad con otras provincias. «Cada vez hay más colaboración entre las comunidades autónomas, que nos prestamos medios si los necesitamos». No hay que olvidar que en un incendio influyen mucho las condiciones y que en siniestros «medios o grandes se implican casi medio millar de personas».
Rayos y la mano del hombre, detrás de los incendios.
Entre los consejos que ofrece Félix Mateo para prevenir los incendios forestales están respetar la normativa en todos los aspectos, tener mucho cuidado y aplicar el sentido común para evitar actuaciones de riesgo. Así, incide en que hay días con mucho riesgo, «que si se puede evitar salir al campo, mejor, que es lo que hacían nuestros mayores». Precisamente, la campaña del Gobierno regional para prevenir incendios lleva el lema de Contra los incendios, implícate y es en esa implicación en la que incide el director del Centro Operativo Provincial, que atribuye los incendios a dos causas. Por un lado, muchos de los incendios que se declaran en territorio conquense son ocasionados por los rayos, pero achaca el 75% de los incendios forestales que se declaran a la mano del hombre, «y no es que sean intencionados, pero de una manera o de otra el hombre, bien por negligencia o accidentes, está detrás».