En el dique seco

Manu Reina
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Sergi Mach tiene que pasar por quirófano tras padecer «desde el pasado mes de abril» el síndrome de Haglund y estará de baja un tiempo estimado de cinco meses

En el dique seco - Foto: Reyes Martínez

El Rebi Cuenca pierde a una de sus piezas para los próximos cinco meses. Y es que Sergi Mach tiene que pasar finalmente por quirófano para subsanar esas dolencias que «llevo padeciendo desde el pasado mes de abril» en el talón. El central padece el síndrome de Haglund con una rotura parcial en la inserción del tendón de Aquiles. 

Sergi Mach incide en que «el espolón que tenemos en la parte del talón ha crecido, y lo ha hecho con forma de punta, lo que ha hecho que, poco a poco, afecte el tendón hasta el punto de provocarme una fisura de prácticamente la mitad porque te lo va cortando». Por lo que toca intervenir «cuanto antes, ya que en el caso de romperme entero el Aquiles, la lesión se agravaría mucho más». 

El jugador se someterá a la operación el próximo miércoles en una clínica madrileña y a partir de ahí «empezará la recuperación de la mejor forma posible para volver a los entrenamientos en marzo». Si las cosas se desarrollan con normalidad, «podré estar jugando en abril». Antes tendrá que estar «seis semanas sin apoyar el pie en el suelo» para que la herida sane correctamente antes de dar el siguiente paso, nunca mejor dicho. Uno de los consuelos es que en enero no hay competición liguera, por lo que se perdería, en principio, menos partidos, aunque su ausencia se notará mucho. 

«Esta noticia sorprende cuando te dice el médico que hay que operar», pero no pilló de sorpresa al jugador, «porque ya lo tenía asimilado al 50 por ciento». Más que nada porque hace ocho meses que viene padeciendo molestias que «me impedían jugar como a mi me gusta o como yo sé». La llegada del verano hizo que «iniciara un tratamiento conservador», pero no ha servido de nada, porque «en el partido ante el Atlético Valladolid sentí un pinchazo que me subió del tobillo a la rodilla», explica. En ese momento «percibí que algo no iba bien» y así se lo confirmo días después un médico tras someterse a una resonancia. 

Sergi Mach, que espera volver más fuerte tras este paréntesis en su carrera deportiva, agradece «todas las muestras de cariño que he recibo en estos días», especialmente del «grupo humano que tenemos en el equipo». Sus compañeros y el cuerpo técnico, así como todo el seno del club, le ha arropado desde el primer momento. El jugador gerundense ensalza que «somos como una gran familia y siempre están ahí para lo que necesite». Mientras tanto, el Rebi Cuenca intentará suplir su baja como sea. El equipo vive un gran momento después de «lograr una victoria muy importante» la pasada jornada en casa ante el Balonmano Logroño (35-31). Pero más que el resultado, cabe destacar «cómo se hizo, con un buen trabajo de todo el equipo, tanto en ataque como en defensa». 

Y es que en una liga «tan igualada es necesario dejar escapar los menos puntos posibles de El Sargal». En los próximos meses Sergi Mach no estará en la campaña, pero sí que será en este tiempo un aficionado más para apoyar a sus compañeros.