Había llovido desde la última victoria del Conquense. Fue el último fin de semana de octubre y para culminar una buena racha de triunfos. Tras ello, vinieron cuatro derrotas consecutivas y dos empates, hasta hoy. Frente a un rival directo por la salvación, como es el Real Madrid C y a domicilio. Los balompédicos fueron de menos a más y todo cambió con una expulsión en las filas blancas, que supieron aprovechar para ganar por la mínima. Un gol y un triunfo con el que se toma aire.

En los primeros minutos de partido, la posesión fue casi en exclusiva del Real Madrid, y es que el Conquense prefirió esperar atrás y salir con balones directos a la espalda, dando libertad en la creación blanca, demasiado estéril y sin ideas en tres cuartos. Ninguno de los dos equipos generaron demasiado peligro, más allá de un disparo de Romera desde la frontal y otro de Álvaro Ginés en área pequeña, bien despejados por Bernabéu. Ambas escuadras estaban más preocupadas de estar ordenadas atrás y que no les hicieran daño, que de ganar profundidad.

La primera clara de los balompédicos llegó en el ecuador del primer tiempo, con una contra en la que Antonio Fernández no definió de la mejor forma cuando se plantó ante el portero local y su disparo se marchó fuera. El filial madridista fue mejor en el cómputo general por lo visto en los primeros 45', y es que Baba fue un puñal por banda izquierda que hizo temblar a Luis Castillo, que sudó de lo lindo para defender. El lateral apuntó un disparo lejano que atajó el meta en la recta final del primer tanteo.

El Conquense gana siete partidos después y toma aire - Foto: Alfonso Fernández

En un último minuto de órdago, se sucedieron sendas ocasiones clarísimas de gol. Primero fue la Balompédica en las botas de Monterde, que estrelló en el meta un pase de la muerte de Caballero. Solo tenía que apuntar mejor y empujarla. Pero es que en la jugada siguiente, Baba, un dolor de muelas constante, en una de sus internadas, disparó y un milagroso Bernabéu despejó y el balón se fue al palo.

Tras el paso por los vestuarios, el equipo de Rober Gutiérrez mordió arriba e intentó dificultar la salida de balón de los pupilos merengues, algo que no sucedió en la primera mitad. Al filo del cuarto de hora, el cancerbero del Madrid volvió a salvar a los suyos con una intervención milagrosa tras un buen remate de cabeza de Yuya en el área pequeña tras un centro de Castillo.

El sino del partido cambió a falta de 20 minutos para el final, y es que Emmanuel vio la roja directa por una plancha al tobillo de Pablo Olivares. Un tiempo más que apreciable para, con uno más, dominar en busca del gol. Un tanto que el míster buscó metiendo en el campo a Jairo Cárcaba en lugar de Antonio Fernández. Y llegó. A diez del final, por mediación de Monterde, que no se puso nervioso cuando 'Caba' se la sirvió de cabeza en bandeja tras un centro lateral. El '7' blanquinegro fusiló para el 0-1.

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El Conquense, de forma inteligente, se dedicó a administrar el tiempo restante y a no perder la cabeza. Por eso, para aumentar el control y crecer en seguridad, entraron para esa recta final Héctor Rubio y Bema Sina por Pablo Olivares y Sergio Rodríguez. Aguantaron como cosacos pese al abusivo alargue y, por fin, se puso punto final a la mala racha.