El Rebi Cuenca parece remontar el vuelo. La continuidad de Isidoro Gómez Cavero como presidente durante otros cuatro años más, allana el camino y el futuro de la entidad es más esperanzador. Lo más importante es que sigue con vida porque había serias opciones de su disolución ante la falta de candidaturas para asumir la presidencia.

No obstante, Isidoro Gómez Cavero «a última hora decidió presentar su candidatura porque no se había presentado ninguna candidatura y me daba pena que se acabara todo». Pero reivindica que «no puedo estar toda la vida aquí». Incluso pese a que «me lo han pedido muchas personas, pero es que, de verdad, no puedo estar aquí siempre y es necesario que haya relevo». El presidente avisa que «es un año muy difícil, no por la situación actual del club, sino por lo que se nos viene por delante». Y es que es «muy complicado, porque tenemos que cumplir con unas normas y condiciones que ahora mismo no cumplimos».

El presidente, que lleva más de dos décadas como máximo representante del club, reconoce que se presenta para «maniobrar y gestionar como podamos», pero incide en que «tenemos que crear una nueva estructura del club». El problema es que, «ahora mismo, no estamos preparados, pero tendré que hacer todo lo posible». Al profesionalizar la Liga Asobal todo cambia. Y ese es otro asunto a resolver para el Rebi Cuenca, «un club que está acostumbrado a vivir gracias a las colaboraciones de muchas personas, que no cobran, pero eso se acaba ya porque te obligan a cambiar».

Isidoro explicará en Asamblea de Socios, que se celebrará en dos semanas, qué personas le acompañarán en su junta directiva y cómo se va a trabajar. Y otra de las indicaciones es recordar que «nosotros no tenemos instalaciones como nos pide la Liga Asobal». La noticia de su continuidad al frente del Rebi Cuenca es una buena noticia pero queda mucha tela que cortar para cumplir con las exigencias de la Liga Asobal.

Equipo. Isidoro Gómez Cavero tranquiliza a la afición porque «tenemos el equipo casi hecho»e incluso desvela que «tenemos varios fichajes que iremos desvelando poco a poco en los próximos días». No se han anunciado antes «porque no sabía qué iba a pasar y quería esperar». Es decir, el equipo saldrá a competir porque jugadores tiene y forjará un gran plantel, el problema en la estructura y todo que rodea al club. «Que no se preocupe la gente en este aspecto», sentencia. 

El Rebi Cuenca empieza así un nuevo ciclo deportivo totalmente distinto a lo que se venía viendo en las últimas temporadas, donde ha llegado a situarse como un auténtico referente en el balonmano nacional. Pero la situación cambia y las exigencias son cada vez mayores. Está por ver qué pasará en los próximos meses y como maniobrará el club.