Una nueva obra pública ha quedado desierta en la ciudad y se suma a la larga lista que se viene produciendo en los últimos años. Esta vez le ha tocado el turno a la mejora y rehabilitación de la calle Hurtado de Mendoza y de la conocida Plaza del Xúcar, con la que el Ayuntamiento pretende dar un vuelco completo al paisaje urbanístico en este punto de la capital, tan transitado tanto por vehículos como por viandantes.

Ninguna empresa se ha presentado a la licitación urgente de estas obras, que partían con un presupuesto de 238.653,92 euros, que con impuestos alcanzaba los 288.771, y que posiblemente se vaya a revisar al alza, aunque todavía no se ha tomado una decisión al respecto. Y es que, tal y como confirma a La Tribuna el concejal de Urbanismo, Mantenimiento Urbano y Movilidad, Adrián Martínez, «el técnico responsable del proyecto ya está trabajando todas las cuestiones relativas a esta obra desierta con el fin de ver qué dirección hay que tomar». 

Para ello, explica que «se están analizando tanto los precios del mercado para comprobar si están ajustados a los del proyecto como la situación del sector de la construcción y ver su capacidad para concurrir».

Esta mejora cambiará por completo el paisaje urbanístico de esta zona de la capital conquense. - Foto: Reyes Martínez

Proyecto. Esta actuación municipal consistirá en ensanchar las aceras a más de tres metros en Hurtado de Mendoza, lo que supondrá la eliminación de un carril. De tal manera, que se dejarán dos de subida, uno para girar hacia Cervantes y otro para seguir recto hacia Fermín Caballero o girar a Diego Jiménez, y uno de bajada hacia Cuatro Caminos. La mayor anchura de las aceras permitirá la disposición de una docena de alcorques a ambos lados para árboles.

En la Plaza del Xúcar, por su parte, se sustituirá la actual isleta por otra nueva, de modo que el tráfico rodado desde Fermín Caballero hacia Hurtado de Mendoza y Diego Jiménez se haga por el lado derecho de la isleta y así separar la circulación de subida de la de bajada.

Además, se ampliará la acera en la curva hacia Cervantes hasta los 3,5 metros de ancho y el actual aparcamiento de motos se trasladará junto al quiosco de prensa y la parada de bus.

La acera de la derecha hacia Fermín Caballero, por su parte, se ampliará a los 3,45 metros, se instalará una marquesina de bus y se dispondrán cinco alcorques para árboles en ambas aceras. Y la que comunica Fermín Caballero con Cervantes, se ensanchará hasta los siete metros.

La actuación se completa con la renovación parcial de redes de suministro y saneamiento, el reasfaltado de la calzada y el nuevo mobiliario urbano y señalización, tanto horizontal como vertical.