La Joven Orquesta de Cuenca ofreció en la tarde-noche del pasado sábado, sobre el escenario del Teatro Auditorio José Luis Perales su quinto concierto de marchas procesionales, bajo la dirección de Pablo Martínez Valiente. Con un lleno absoluto de localidades, una vez más, la joven formación deleitó al público con un fabuloso concierto.
Un centenar de jóvenes músicos que conjuntaron virtuosamente la sensibilidad de sus instrumentos de cuerda con la sonoridad de los de viento y percusión, en un bello empaste que apasionó a todos. La presentación del acto corrió a cargo de Javier García Salmerón, que arrancó en los asistentes los primeros sentimientos nazarenos.
Mater mea (Ricardo Dorado), De Candelas coronada (David Guirado y Álvaro Rozalén) y Virgen de la Esperanza (Luis Vicente S. Cachero) fueron las tres primeras obras que precedieron a un estreno realmente espectacular: Ecos de Angustia, compuesta y dirigida por Sergio Bascuñana Guerra y dramatizada y cantada por la hermosa voz de Clara Serrano Esteban. Una belleza musical, plástica y de voz con una puesta en escena que impresionó al público asistente.
La Joven Orquesta de Cuenca brinda un fabuloso conciertoTras el descanso, la progresión en la iluminación del auditorio acompañó a la obra de La madrugá (Abel Moreno) con una armonía inigualable de sonido y luz. Tras ello, llegaron Y en tus manos, terciopelo (Lidia Mateo y Óscar Contreras), Señor del Miércoles Santo (Pablo M. Valiente) y Concha (Victor M. Ferrer). Tras unos eufóricos aplausos del público, la Joven Orquesta interpretó dos bises de José Vélez García: Mesopotamia y Jerusalén.
La Joven Orquesta de Cuenca brinda un fabuloso conciertoEn resumen, una tarde-noche para recordar, unos jóvenes músicos conquenses que supieron despertar en la audiencia su sentir nazareno y, entre ellos, instrumentistas, compositores, vocalista y dirección realmente magistrales.