Durante los meses de diciembre de 2024 y enero de 2025, efectivos del Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca, junto con Inspectores de la Delegación Provincial de Sanidad y agentes medioambientales, han llevado a cabo distintas inspecciones no sólo sobre las actividades cinegéticas desarrolladas en las distintas comarcas de Cuenca, sino que dicha labor se ha ampliado también al control sanitario de aquellos productos y subproductos cárnicos no destinados a consumo humano.
Como resultado del dispositivo dirigido por el Seprona, se ha dado cuenta a la autoridad competente en materia de sanidad de la detección de más de treinta infracciones por contravenir la legislación sanitaria.
El sector cinegético en Castilla-La Mancha posee un elevado arraigo, haciendo que cada vez se lleven a cabo más prácticas zootécnicas sobre especies cinegéticas, lo que aumenta el riesgo de contagio de enfermedades a especies domésticas, así como la creación de focos de infección en la manipulación de subproductos no destinados al consumo humano.
Dentro de este ámbito, se ha llevado a cabo la operación para la prevención del contagio de enfermedades entre la fauna silvestre, el ganado doméstico y las personas.