Miguel Romero

Miguel Romero


Lucas Aguirre disfruta de la pintura de Romero Sequí

23/10/2024

Estoy convencido de que el filántropo Don Lucas Aguirre Juárez, nacido en 1800 en nuestra ciudad de Cuenca, dentro del seno de una familia liberal pequeño-burguesa, disfrutó y mucho –desde el lugar en qué se encuentre– viendo la pintura que nuestro artista Pedro Romero Sequí ofrecía en las paredes de sus tres amplios espacios culturales. Y lo haría porque su espíritu inquieto de hombre y mecenas de Arte y Cultura, fundador de las Escuelas Aguirre para niños, en Siones, Cuenca y Madrid, y a la vez impulsor del movimiento pedagógico del krausismo –lo que después será Institución Libre de Enseñanza– sería muy similar al espíritu de nuestro Romero Sequí, hombre que dedica su tiempo a trazar los contenidos pictóricos en los que define su propia personalidad.

Pedro Romero es autodidacta, heredero de esa vena artística que dictara humildemente su padre, quien también quiso indagar entre el lienzo y el óleo, para dedicar una gran parte de su vida a mostrar las inquietudes que expresa un pincel –marcado por la religiosidad de su espíritu y el amor a las tradiciones–, haciéndolo entre Cuenca y Sevilla, o entre Cuenca y Cañete, sin olvidar ese paseo casi cotidiano entre Carretería y la Plaza Mayor.

Unas 60 obras, de diferentes tamaños, dentro del mismo estilo y técnica, con paisajes urbanos, retratos de rostros del celuloide, de la historia y del costumbrismo, se muestran desde el pasado jueves, en la Sala de Exposiciones del Centro Cultural Aguirre, en horario habitual de apertura, dentro del proyecto Días de Arte que excelentemente coordina Carlos Codes, bajo el auspicio de la Concejalía de Cultura de nuestro Ayuntamiento. En definitiva, una brillante colección que titula Antológica compendiando diez años de pintura en su recorrido personal.