Miguel Romero

Miguel Romero


El traslado del Pendón en la Catedral

22/09/2021

San Mateo fue hijo de Alfeo y vivieron juntos en Cafarnaún, cerca del lago de Galilea.

Alfonso VIII, rey de Castilla y nacido en Soria, a pesar de la duda documental, decidió en el siglo XII, afrontar esa parte de recuperación de los territorios peninsulares que desde el siglo VIII ocupaban los musulmanes con capital en Córdoba, saltando la línea del río Tajo y ejercer esa influencia clave para conseguir imponer la Cristiandad frente a la Media Luna. Se culminaría con la gran batalla de las Navas de Tolosa.

En ese objetivo, un poco antes, llegó a Cuenca, la sitió durante meses y por fin consiguió que capitulase en el año 1177. Como era habitual, el pendón de Castilla le acompañaba, como también afirman, llevase junto a él, la imagen de la Virgen del Sagrario, realizada según algunos investigadores, en los talleres románicos de Monforte de Lemos, y con uno y otra, entró victorioso en la ciudad de las Hoces.

El corregimiento conquense, allá por el siglo XVI, decidió que fuese la festividad de San Mateo, un 21 de septiembre, el momento de celebración de tal hecho y así quedó constatado en la documentación del momento.

Por eso, año tras año, el Ayuntamiento de Cuenca, junto al Cabildo catedralicio y la Asociación de Peñas Mateas, llevan a cabo actos solemnes que conmemoren aquel hecho, trasladando el pendón desde la catedral donde está custodiado a las Casas consistoriales en el día 20 y devolviéndole el 21 de septiembre, festividad del santo de la conquista.

Este año 2021 no ha podido celebrarse la fiesta, tal y como es tradicional, corriendo vaquillas, celebrando desfiles y verbenas y actos solemnes del traslado del Pendón; tal es así, que se ha decidido y creo modestamente que con muy buen criterio, hacer un traslado en el interior del templo catedralicio, desde el Altar Mayor a la Capilla de San Mateo en desfile por la Vía Sacra, con música de la Banda Municipal el día 20, y desde la capilla devuelto al Altar Mayor para celebración de su Santa Misa en el honor festivo al día siguiente, 21 del citado mes de septiembre.

Tal es así, que las autoridades han puesto el toque de solemnidad, junto a las Peñas mateas, a los miembros del Cabildo, a la Banda de Música y quienes hemos querido acompañar para rememorar lo que "por siempre jamás" debía celebrarse para satisfacción y orgullo del pueblo de Cuenca.

Sea pues, de esta manera ahora y vuelva a su tradicional traslado cuando los tiempos de pandemia cesen, y yo, cronista del tiempo, me siento especialmente satisfecho y orgulloso de un pueblo conquense que sabe y quiere mantener las tradiciones como esa Alma del Pueblo que sirve para definir las señas de identidad y el desarrollo cultural en base a su historia y a su rico pasado.

La Catedral ha estado como siempre, al lado y apoyando lo que un momento histórico requiere y el grupo Conca ha conseguido con su presencia y su recreación histórica de los reyes Alfonso VIII y Leonor de Plantagenet, estar ahí, acompañar y servir de testimonio de un hecho que fuera decisivo para el acontecer de una sociedad cristiana.