Hay pocos espacios tan emblemáticos y de personalidad propia como el Salón de Plenos del Ayuntamiento de la ciudad. Sin duda, el antiguo edificio del Consistorio de Cuenca, remodelada su fachada hace escaso tiempo, mantiene un espacio solemne, admirado por la vecindad y simbólico en toda su dimensión histórica, como es ese Salón que sirve de corredor entre las dependencias municipales que le flanquean. Ocupando la parte alta de los tres arcos que dan acceso desde la calle Alfonso VIII, Anteplaza y Plaza Mayor, tiene un balcón corrido en el que han tenido lugar los pregones más festivos de la ciudad, entendiendo que la fiesta matea encierra en sí misma, el reflejo o seña de identidad de una ciudad como la nuestra.
Sin duda, este edificio barroco en su exterior con fachada articulada en tres plantas, es también parte importante de la historia, la misma que simboliza esa escalera que se cierra en el piso alto con una bóveda plana y decoración de yeso, y que alberga como decoración una serie de cuadros al óleo de significado casual.
Aquí tuvo lugar el pasado viernes, con la presencia del prestigioso Ferran Adrià, un encuentro entre nuestro plantel de restauradores y maestros de la cocina, autoridades institucionales, periodistas y agentes sociales, con el reconocido como mejor cocinero del mundo, junto a la representante de la empresa Telefónica, patrocinadora del evento, para fortalecer con su presencia la campaña que ha supuesto para Cuenca ese distintivo de Ciudad Gastronómica Española 2023.
Sin duda, este marco del Salón de Plenos ha sido el ideal para poder establecer ese foro de atención en el que la cocina o el sector gastronómico español tiene el principal protagonismo en una sociedad contemporánea como la que vivimos, afianzando con ello, los valores culinarios que supimos heredar de nuestras abuelas y que ahora, ofrecen con ese plus de tradición e innovación, una de las actividades más esperanzadoras dentro del panorama económico español y, si cabe, mundial.
El maestro Adrià expuso sus acertadas reflexiones en un marco de excelente acogida, con la presencia y presentación de nuestro alcalde Darío Dolz, al lado del presidente de Fepet, Mariano Palacín, y frente a cocineros conquenses, ávidos de conocer y aprender del «maestro de maestros de la cocina».