Javier Caruda de Juanas

Javier Caruda de Juanas


Una ausencia presente

09/01/2025

Vuelve el pulso a la ciudad tras la celebración de las fiestas navideñas en un tiempo civil que dura lo que tarda en llegar el Roscón de Reyes a la mesa y que, en clave católica, se extiende hasta el próximo domingo, festividad del Bautismo de Nuestro Señor. Entre celebraciones, deseos de felicidad y salud, sorteos, encuentros, reencuentros y promesas de vernos más este año quizá han pasado desapercibidas cuestiones y proyectos (que ya son realidad) afectando a la vida de la ciudad en su día a día. Paseando estos días en aras de encontrar (y disfrutar) nacimientos y belenes que han conformado la necesaria ruta de belenes auspiciada por la Junta de Cofradías, hemos podido comprobar que, al fin, la ansiada señalética del Casco Antiguo facilita la visita del turista y, a buen seguro, completa el conocimiento del conquense sobre el callejero por el que discurre buena parte de su vida. 

Seguro que más de uno de nosotros pensará que está incompleta, que falta un código QR para poder descargar más información e, incluso, habrá quien eche en falta la traducción a otros idiomas. Sea como sea, esto es una buena noticia. O al menos un buen comienzo. Igual que lo ha sido el programa que nuestros munícipes nos han preparado con el fin de poder disfrutar de estos días. Ustedes mismos han podido comprobar la extensión del mismo, ofertando una parrilla de actividades que nos han tenido entretenidos a lo largo de las pasadas semanas. Música, teatros, actividades infantiles, belenes, torneos deportivos (con el lunar de aquellos que no entienden que se programan con el único fin de divertirnos haciendo deporte, no para reclamar y exigir como si estuviéramos en cualquier campo de fútbol), pasacalles, mercadillos… empiezan a hacerme creer que, dándole las vueltas necesarias, podemos hacer de NaviCuenca un destino turístico interesante y una excusa importante para que las calles rebosen de alegría durante las frías tardes del diciembre conquense. 

Aglutinar en espacios próximos las diferentes ofertas permiten que, casi al mismo tiempo, puedas visitar el belén de la Diputación, escuchar un concierto en Aguirre y comprar un regalo en el mercadillo que, necesariamente, debe mejorar su aspecto y oferta. Con un poquito de implicación, trabajo y dinero, la Navidad de 2025 seguirá la trayectoria ascendente de la de 2024. Pero, como todo no puede ser bueno, tengo una ligera zozobra cultural ante la ausencia de la banda de música en la cabalgata de Reyes. Las noticias publicadas, solo unos días antes, hablan de una nueva licitación municipal que puede permitir la sustitución de la A.M. Virgen de la Luz, referente histórico de la cultura conquense, por cualquier otra asociación. Sin dañar a nadie, es siempre preferible apostar, apoyar y pelear conjuntamente por lo propio que por los que puedan venir. Ojalá sea exclusivamente una cuestión de tema administrativo. De momento, la cabalgata de Reyes tuvo un déficit importante de música en directo sin la participación de los pajes de abrigo, corchea y silencio, convirtiendo a la Banda de Cuenca en una ausencia presente.