La historia de la ciudad de Cuenca nunca tiene fin. La verdad es que ahondar en su pasado enriquece la mente del que lo hace, porque descubres constantemente aspectos de interés encomiable.
Este fin de semana pasado, en la sede del Colegio de Arquitectos de Cuenca tuvo lugar un Seminario sobre la Judería de Cuenca, su origen, evolución, desaparición y aspectos coyunturales que predeterminaron la aparición de aquella nobleza conquense de carácter converso que dirigió los destinos político-sociales de nuestra ciudad en la época moderna.
Expertos investigadores, historiadores, arqueólogos, profesores, periodistas y profesionales del asociacionismo se dieron cita el viernes por la tarde y el sábado al completo, analizando en conferencias amenas y científicas, aspectos de alto interés, no solo histórico sino patrimonial y religioso.
Las intervenciones de autoridades desplazadas desde Madrid, León y Jerusalén dieron ese plus de rigor y peso específico a una inauguración que convocó a un elevado número de conquenses interesados en el tema, participando en un agradable coloquio que potenció el valor de este encuentro.
La sede del Colegio de Arquitectos, maravilloso edificio adaptado en esa parte de la ciudad donde el casco antiguo inicia su ascenso entre el río Huécar y el popular barrio de San Martín, al lado de lo que fue el molino de San Martín, antiguo coso taurino y ahora sede del teatro Auditorio «José Luis Perales» de nuestra capital, sirvió de marco incomparable para un encuentro muy interesante y atractivo. Estudiosos de diferentes partes de la geografía española se dieron cita, compartiendo conocimiento y diversión, recorriendo las calles y la ubicación de la antigua Judería conquense que, hasta los pogromos de 1391, ocuparía el llamado barrio del Alcázar, lo que ahora es la plaza de la Torre de Mangana, cerca del centro neurálgico del Casco Antiguo, Patrimonio de la Humanidad.
Itzjak Benabraham, del Centro de Estudios Moisés de León; Abraham Haim, del Consejo cultural sefardí de Jerusalén, los arqueólogos Michel Muñoz, Santiago David Domínguez, Juan Manuel Millán Martínez y la presencia de María de Miguel, del Centro Sefarad de Madrid, junto a Roberto Gómez, aportaron sus trabajos de investigación en este seminario que ha contado con la financiación del Consorcio Ciudad de Cuenca y que, organizado por el Instituto de Estudios Conquenses que preside Juan José Arteaga, potenciando el desarrollo cultural de nuestra ciudad.