En este pasado fin de semana ha vuelto la competición en casi todas las ligas deportivas que afectan al deporte conquense. Sólo ha faltado el balonmano de Asobal por ese paréntesis al que se ve obligado por la celebración del Campeonato del Mundo de selecciones en este mes de enero y febrero. Los demás deportes como fútbol, fútbol sala, baloncesto o voleibol, han vuelto a sus ligas competitivas. Vuelve la competición liguera, sí, pero no el deporte porque éste no se ha ido en estas navidades de la capital conquense con la disputa de torneos navideños de fútbol sala, baloncesto, voleibol y tenis de mesa, con el consiguiente esfuerzo organizativo. Pero, si hay que hablar de un acontecimiento deportivo en Cuenca en estas fechas, no hay otro que la Carrera del Pavo, la clásica San Silvestre de otras ciudades, que mantiene el nombre original de cuando se disputó por primera vez y, como en ediciones posteriores, se regalaba un pavo vivo a los ganadores.
En este 31 de diciembre de 2024 se celebró la 41ª edición, organizada un año más por el Club Rujamar Atletismo Cuenca. En esta edición se inscribieron cerca de 2.000 participantes, 1.367 en el circuito de siete kilómetros y 618 en el de dos kilómetros, en el que participan los niños y las familias. No es nada fácil organizar una prueba con tanta y variada participación, pero un año más el Club Atletismo Cuenca lo volvió a hacer con la dificultad añadida de que no se pudo instalar la meta en el campo Joaquín Caparrós (la 'Bene') por estar en obras. La llegada se situó tras la bajada al Sargal, junto al río. Hubo demasiada retención en los corredores ante la línea de meta y mucho frío en esos minutos eternos antes de cogerte el tiempo. También hubo quejas porque, a la bolsa que se entregaba a los corredores, le faltaban componentes conforme avanzaba el número de participantes en la llegada. No había para todos el mismo contenido. Circunstancias que habrá que tener en cuenta para próximas ediciones, máxime si se cuenta con tan alta participación.
El otro acontecimiento deportivo destacable es el Torneo de Fútbol Sala por Navidad, con más de 20 años de antigüedad y que desde hace diez años lleva el nombre de Torneo Navidad Joaquín Caparrós, por el apoyo de la Fundación de Joaquín Caparrós. Este torneo se ha disputado en las categorías alevín, infantil, cadete y sénior. Siempre ha sido una fiesta El Sargal, donde se disputan la mayoría de los partidos, con las finales en el Día de Reyes. Lamentablemente, esta edición tuvo dos incidentes difíciles de entender. El más grave fue el bofetón de un jugador a un árbitro en un partido senior. El otro incidente fue tras la final de la categoría cadete. Dos jugadores se enzarzaron y el asunto terminó con padres discutiendo en la pista.