El tren partió de la estación allá por 2021. Por delante, un viaje disruptivo, pero esperanzador para aquellos que pilotaban los mandos de la máquina. Ese tren buscaba el «desarrollo territorial» y la «transformación urbana» de Cuenca. Hasta la fecha, tres años más que cumplidos de recorrido con infinidad de sinuosas curvas y túneles oscuros en su trazado. De hecho, la locomotora ha llegado a estar parada más de un año y medio por la judicialización del proceso, y es que a ese tren llamado Plan XCuenca no se subieron todos los pasajeros que podían haber comprado un billete en la estación de salida. Todo el mundo opinó sobre hacia dónde iba ese viaje, con más y mejores argumentos o con pocos y malos. Daba igual. Lo importante era no permanecer al margen. Partidos políticos, sindicatos, patronal, plataformas sociales... todos tenían un punto de vista y el tren dividió a los pasajeros en una dualidad maniquea.
Después del impasse judicial que ha mantenido al tren parado en la estación durante un largo periodo de tiempo para desesperación de algunos, el motor se ha vuelto a poner en marcha tras la última sentencia del Supremo desestimando las cautelares presentadas por un grupo de ayuntamientos contrarios al cierre de la línea. Hasta aquí, todo correcto. El trayecto de la vía tenía que seguir un camino u otro, sonreír a unos o negar a otros, pero continuar en definitiva. El parón era solo momentáneo. La sorpresa, lo que nadie esperaba tras esta reanudación del viaje, es que parte de los viajeros que en 2021 prefirieron quedarse en la estación, han decidido comprar billete. El PP –o una parte de éste, mejor dicho–, cree ahora que lo mejor es «exigir las inversiones necesarias que se han prometido en Cuenca» dentro de este Plan. Esa parte popular que ahora sí se sube al tren, la personificaron hace tan solo unos días el presidente regional, Paco Núñez, y una corriente alternativa en el seno del PP conquense.
Las principales 'espadas' del PSOE de Cuenca, defensores del Plan desde el minuto uno y al frente de las instituciones, han aprovechado este viraje popular para pedir «unión» en torno al XCuenca, esgrimiendo que tanto el pueblo en las urnas como la Justicia en los tribunales les han dado la razón. Solo falta por ver lo que haga un pasajero clave y en cuyo tejado está la pelota. El alcalde de Huete y portavoz de la Plataforma Pueblos con el Tren, Francisco Javier Doménech, en declaraciones a La Tribuna, se mantiene en sus trece en una clara declaración de intenciones: «El Plan XCuenca es negativo para la provincia». ¿Hacia dónde nos llevará ahora el viaje?