Leo Cortijo

Leo Cortijo


Una brecha interna y ¿también externa?

24/03/2025

Una lectora, amiga y figura muy importante del día a día de la ciudad, me envía un WhatsApp tras leer –en La Tribuna antes que en otro sitio–, que la Asociación Musical Virgen de la Luz sí se presentará finalmente a la licitación abierta por el Ayuntamiento, que es la segunda y además fue convocada de urgencia. «Mejor para todos, teniendo en cuenta la Semana Santa» –comienza su mensaje–, «pero queda mucho por trabajar cuando acabe, porque mucho me temo que esto ha abierto una brecha no solo en la banda, también en la ciudad. Y aquí tenemos que mirarnos todos», remata con sobresaliente tino. Es una mujer notablemente inteligente, de las que no se queda en la superficie, sino que suele hundir su intuición hasta lo más hondo en todos los asuntos de cierta trascendencia, y por eso no solo celebra el 'sí' del colectivo musical después de tanto vaivén, sino que añade una idea que invita a la reflexión.

En primer lugar, pone sobre la mesa la división que los cambios de parecer han podido generar en el seno de esta agrupación y de las consecuencias que esto pueda tener. Cuando se vota si presentarse o no al concurso y el resultado es 27 en contra y 24 a favor, no hace falta ir a Salamanca a estudiar tres carreras para ver que hay dos bloques, prácticamente calcados, con dos pareceres bien distintos. Esta es una ciudad pequeña y muchas de las cosas que en esas reuniones se hablaron, corren como la pólvora. Los típicos dimes y diretes que a estas alturas casi todo el mundo ha escuchado, han hecho formar un juicio. Y el que no los ha escuchado, pero ha visto cómo se quedaba desierta una primera licitación y el Consistorio convocaba otra de urgencia con mejores condiciones para llegar sí o sí a Semana Santa, también se ha creado su propia opinión.

Por ahí va el comentario de mi audaz amiga. Entiende, y yo empiezo a ser de esa opinión, que el cómo se ha gestionado esto (y se sigue gestionando, por cierto, porque no ha terminado) por parte de la asociación ha podido generar un viraje en la opinión pública. Al principio, todo eran mensajes de apoyo y ánimo hacia el colectivo y se señalaba a los culpables a diestro y siniestro. Ese 'calor' popular ha ido menguando –o esa es la sensación de mi amiga y mía– conforme se han ido sucediendo los acontecimientos y las reacciones de unos y otros. Todavía quedan algunos capítulos en este sainete –hoy mismo expira el plazo para presentar oferta– y todavía no sabemos si hay brecha y si, de haberla, podrá cicatrizar.